Dicen que cuando vas a un lugar nuevo, lo suyo es que te adaptes a sus costumbres y tal. Por esto de no desentonar. Pero cuando no sabes, puedes liarla parda. O al menos, quedar de muy mala manera. La pobre Jennifer Lawrence casi levanta las iras de los hawaianos después de tener cierto incidente con lo que al parecer era una roca sagrada y un culete muy, muy picajoso.
Jennifer está rodando la segunda parte de ‘Los juegos del hambre’ en Hawai, y ya sabéis cómo son estas cosas. Trajes incómodos, jornadas eternas y repetir una y otra vez la misma escena a pesar de que no puedas con el pellejo. Y claro, cuando una está cansada, se sienta donde pilla… y se rasca con lo que tiene más a mano.
Llevábamos unos trajes horribles que estaban mojados y me empezó a picar el culo, y no lograba calmarlo con nada, así que empecé a frotarme el culo con una de las rocas. ¿Sabes cómo es que nada pueda satisfacer un picor? Intenté todo y entonces empecé a hacerlo, y todos los cámaras se atragantaron. Entonces, esta súper roca se cayó dando tumbos por la colina y ellos gritaban: “¡Es su culpa! ¡Es una roca sagrada!
Ni me imagino la cara de póker que se le debió quedar a Jennifer cuando vio rodar ladera abajo una roca sagrada. Imaginad que llega a España y se rasca el trasero contra un paso de Semana Santa… Pues algo así debieron sentir los locales cuando se enteraron del asunto. Esperemos que no hubiera demasiadas represalias…
Vía | Heatworld
Foto | Jennifer Lawrence Fan
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