Ay qué sustito madre mía, qué sustito. Hoy tenemos Cristiano Ronaldo por partida doble. Primero vimos esas impresionantes imágenes de sus vacaciones piscineras en Madeira a pecho descubierto (babas) y ahora tenemos que dar la noticia de que ha sufrido un accidente de coche cuando iba a los entrenamientos. Eso sí, respirad tranquilos que ha salido totalmente ileso, no se ha hecho ni el menor rasguño, eso sí, su Ferrari, porque sí no se la ha dado con un Ford Fiesta, ha quedado echo un cristo, vamos que ni para piezas y eso que cuesta más de 250.000 euros (casi ná).
Al parecer cuando se dirigía a los campos del Manchester United, chocó contra uno de los muros de un túnel que pasa por debajo del aeropuerto. Resumiendo, una torta como un pan. Sin embargo, a pesar de la magnitud del golpe C-Ron salió por su propio pie del amasijo de hierros y ahora todo el asunto está en plena investigación policial.
¿Mi teoría? Pues la que tiene la policía, tiene pinta de que iba a gran velocidad y además, estoy segura que fijo que iba haciendo el cabra, principalmente porque justo detrás de él iba un compañero de equipo, Edwin van de Sar, en su Bentley (qué pasa con esta gente, no pueden tener un utilitario como el resto del mundo…). Es lo típico de vacilarse entre coches. Decir que dio negativo en alcohol (menos mal), y que al menos todo quedó en un susto.
Aquí podéis ver imágenes de cómo quedó el carro… qué pena, con lo chulo que era…
Vía | Daily Mail
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