Hasta los Biebers de... Paul Bikes

Creo que después de ver la entrevista aparición promocional de nuestro Justin más internacional en el programa de “El Hormiguero” en Cuatro, me he llevado una ¿grata? sorpresa: Justin es un chico majo, Pablo Motos ni lo uno ni lo otro.

Y mira que lo intento, que ya he visto este programa muchas veces… pero nada, sigue sin hacerme gracia, ni puedo decir que el presentador haga algo por remediar mi tedio. Y es que lo curioso es que son los invitados los que consiguen avivar el resultado, junto con algún que otro colaborador, eso sí. Del programa destaco las siguientes declaraciones de JB:

No puedo besar a todas mis fans cuando me piden autógrafos, ni leer todas las cartas que me envían

No te deprimas por eso hombre, si a mí me pasa lo mismo… aunque igual es porque no me envían ninguna, claro.

Mi paso preferido se llama “la ola”

Vaya, creo que por esta vez tampoco nos llevamos el premio a la originalidad bautizando pasos… pero bien, vale, puede valer.

Pero uno de los momentos estrella, sin duda alguna, fue cuando Pablo le sacó la pregunta picantona, como no podía ser de otro modo… “¿te gustan las chicas un poco mayores que tu? como Katy perry, Beyonce, etc? ¿Quién es tu chica favorita? Y su respuesta lo dejó en su sitio:

¿Mi mujer favorita en el mundo? ¡Mi madre!

Y, para todas aquellas que querráis estar entre su “target”, nos dejó unas pistas para saber como enamorarlo:

Me gustan las chicas divertidas, que no tengan miedo de reirse de sí mismas, con la que se pueda hablar

Y lo que más me ha sorprendido de todo: en 1 minuto y 30 segundos el tío resolvió un cubo de rubik, en directo, y comentó que lo había conseguido en 48 segundos en otra ocasión… Si no lo viese no lo creería, pero parece que el chaval tiene tino…

Por último, no puedo dejar de destacar el duelo de peinados tapa-frentes Bieber – Piedrahita, (yo no soy objetivo y me quedo con el coruñés, que lo ha lucido así desde el siglo pasado sin atender a modas pasajeras). En fin, que no es tan malo el Bieber como lo pintamos, y menos aún cuando lo comparamos…