Angelina Jolie: lo que más me gusta y lo que menos

Hoy es un día especial para Angelina Jolie. Es su cumpleaños. Caen 33 añazos y se encuentra en Francia junto con su inseparable Brad Pitt y su familia sacada de un anuncio de Benetton. Está a punto de dar a luz, aunque algunos rumores indican que sus gemelas ya han venido al mundo. Mientras se puede confirmar esa noticia, voy a repasar lo que más y lo que menos me gusta de esta emblemática actriz y estrella de Hollywood.

Ahora está en una etapa en la que la familia parece que es su prioridad. Es habitual encontrarla por distintos rincones del mundo rodeada de sus retoños, dando muestras solidarias y de una madre coraje. Al igual que la vemos paseando por la alfombra roja de Cannes, sonriendo como superestrella. Pero, Angelina ha tenido un pasado. Y bastante turbio y agitado, por cierto.

Lo que menos me gusta:

Su tendencia al exceso. A sobrepasar la línea en la que el desfase (como actriz, como icono sexual, como mujer...) se hace protagonista, restando la fuerza y la sensualidad innatas que posee. Por coquetear con las drogas de forma tan abierta, como la que prueba una nueva bebida isotónica. Por esos capítulos de bisexualidad, de incesto con su hermano poco clarificados y de propugnar abiertamente sus gustos sexuales y el sadomasoquismo, con sus dos maridos anteriores. Todo eso está muy bien, pero para ser un "animal rebelde", no es necesario ir acumulando perlas y boquitas de piñón de tono burdo ni mostrarse tan salvajemente desfasada.

Tampoco me gusta ese espectáculo que tiene montado como mejor madre del mundo, miss ONG, que parece buscar con ansia un premio Nobel de la solidaridad. Que está bien y es elogiable, pero en esta medida parece que quiere dejar claro que está de vuelta de todo, que prefiere vivir alejada del glamour y de las portadas de revistas masculinas, y que es la salvadora del mundo.

Me gusta bien poco el manejo a su antojo de la delgada línea que separa su vida privada y el mero espectáculo. Le molesta que le fotografíen con sus hijos, pero posa con naturalidad cuando hay mucho dólares de por medio. Cuando le viene bien defiende a ultranza su privacidad, pero cuando lo necesita se muestra como una ventana abierta.

Y esa faceta de actriz sobrada, de poner su nombre y cara en títulos mediocres, tampoco es la que más me agrada. Se pueden tener fracasos y tropiezos en ciertos títulos, pero cuando se alcanza cierto prestigio es peligroso dejarse caer en películas de medio pelo, por mucho dinero que haya detrás.

Lo que más me gusta:

Por supuesto su postura abierta, transparente y rebelde. Pero con inteligencia. Cuando ha querido ha sabido encandilar a medio mundo, posar con mirada provocativa y mostrar su tatuada piel con una sensualidad y un erotismo incomparable.

Sus labios y sus ojos. Bueno, también el resto más obvio de su físico femenino. Y que ella defienda que todo es producto de la naturaleza, que nada le debe a la cirugía estética. Y a me lo creo, porque a sus antiguas películas hay que remitirse. Esos labios carnosos siempre han estado ahí.

Me encanta su capacidad para interpretar con enorme fuerza. Es como un ciclón en pantalla, cuando da lo mejor de sí misma. Arrasa con personajes radicales, plenos de energía en los que se mete de lleno.

Su capacidad de transformación, de cambios de look radicales, pero siempre llamatiovos. Es camaleónica, posmoderna y siempre sabe captar la atención.

Y su lado comprometido de verdad. Por destinar gran parte de su fortuna a causas solidarias, y ser embajadora de la ONU y meterse en lugares del mundo en conflicto. Por ayudar a países desfavorecidos, adoptando hijos y utilizando su fama para dar a conocer el lado más tercermundista de muchos rincones del planeta.

Te felicitamos desde Poprosa y te damos la enhorabuena por tus gemelas. Aunque sea por adelantado.

Y a vosotros, ¿qué es lo que más os gusta y lo que menos de la Jolie?

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