La luna de miel ha dejado destrozado al matrimonio de Bennifer. Vamos, tanto es así que hablando de 'lunas' y roturas, la pareja podría pasarse por 'Carglass' para ver si Joseba puede arreglar algo. Tanto es así que Ben Affleck y Jennifer López habrían decidido separarse tan solo tres semanas después de su boda.
Así lo ha contado el portal 'Hollywood Life' (vida de Hollywood; idiomas, queridas, idiomas): Ben y JLo entiendes que, tras tantos días juntos por Europa, tomar distancia es lo mejor para "fortalecer su relación".
Se tienen tan vistos que prefieren tomar caminos separados para reencontrarse con más fuerza y echarse un poquito de menos. Vamos, el mismo fenómeno que se hace al llevar a los niños de campamento: te quiero mucho, pero un tiempecito lejos tampoco pasa nada.
Según informa este medio: “Lo único que hace que su relación sea tan única es que saben más que nadie las demandas que conlleva hacer lo que hacen. De hecho, creen que pasar tiempo separados los hace más fuertes y es perfecto porque cuando están separados, están ganando una cantidad extrema de dinero. Es una situación donde ambos ganan", aseguran.
En este caso, tanto Ben Affleck como Jennifer López quieren centrarse en sus carreras artísticas, donde creen que valen más por separado que juntos. Una forma no solo de ganar más dinero sino también de que sus próximos proyectos no se vean eclipsados por sus fotografías en las portadas de las revistas y ser la comidilla de los programas del corazón.