Me encanta 'The Big Bang Theory', y soy buy, muy fan de Sheldon. Pero si hay algo que me trae por el camino de la amargura son las camisetas y sudaderas que saca siempre Kaley Cuoco en su personaje de Penny. ¡Me chiflan! Aunque por mucho que las he buscado, me he quedado con las ganas. Eso sí, entre tanto, lo que sí he encontrado ha sido un montón de modelitos de la actriz en los saraos variados a los que ha acudido... Y sólo os digo una cosa: los fashionistas de la semana van de patinar... ¡Y mucho!
Tu peluquero y tu maquillador te odian: acéptalo
Triunfar en una alfombra roja no significa únicamente llevar un vestidazo de los que quitan el sentido y que te quede como un guante. Puedes estropear al mejor diseñador si de repente, a tu maquillador le da por ponerte unos morros góticos que asusten al miedo.
Si la mañana del sarao, tu peluquero se levanta con ganas de innovar y te propone un flequillo radical mientras pone a calentar las planchas... ¡Dile que se vaya a freír espárragos! Ah, ¿que no? Pues mira lo que ocurre cuando le dejas al trastornado de turno meterle mano a tu pelazo.
Da escalofríos. Y eso que el vestido, a pesar de que el largo no me termina de convencer, me parece uno de los más bonitos que ha sacado Kaley. Otra opción a la hora de cargarte el vestido es que te coloquen un tupé que requiera de un andamiaje propio para sostenerse. Eso le ha pasado en los Premios ACM 2013. ¿Y el escote del vestido no está un poco bajo?
Aunque, claro, si la alternativa es que nadie te peine y te toque hacerte una coleta ladeada y apañarte el flequillo como Dios te dio a entender... Normal que prefieras ponerte en manos de algún estilista, aunque sea un babuíno puesto de heroína hasta las cejas.
Y tenemos la otra opción, que es que tu maquillador te diga que lo que se lleva es ir natural, y mientras sales por la puerta, se junte con el que te propuso ese vestido y se partan el bolo de la risa. Vaya tela con el lazo del cuello...
Yo de ti no me volvía a quitar los pantalones
No me digáis que uno de sus mejores looks no es el que lució en los Premios Grammy 2013. Vale que quizá la ocasión requiriese algo un poco más de tiros largos, pero a mí me encanta. El maquillaje, el pelo... y los pantalones de cuero le sientan de muerte en combinación con la chaqueta. ¡Guapísima!
Un poco princesa se la vio en los People's Choice Awards, que aunque no me disgusta, me parece un poco soso. Eso sí, lo que no me mola nada son los plataformones de los zapatos con ese acabado brillante.
Por desgracia, a Kaley le molan los colores empolvados, y no terminan de sentarle demasiado bien. Éste en color nude como de lycra, y con todas esas arrugas a la altura de la cintura no me gusta nada. Ni siquiera le pone un toque un poco vivo con el clutch...
Y cuando por fin decide optar por un tono que le diga algo, se nos planta un amarillo con zapatos dorados que tiene delito. Los volantes de la falda, el lacito en la cintura... Madre del amor hermoso. Y lo de la raya al medio en plan "me acaba de lamer una vaca"...
Aunque si la alternativa es que se nos ponga un saco blanco con largo monjil y unos zapatos de institutriz terribles, ¡casi prefiero verla de limoncito!
En Poprosa | Los fashionistas de la semana
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