Tener como amiga a María Patiño debe ser una gozada: siempre lleva mechero (es fumadora) por si hay que encender alguna vela de cumpleaños, te hace terapia emocional pidiéndote que no dejes de soñar con Manuel Carrasco como banda sonora de tus nuevas ilusiones y es madrugadora los fines de semana (para presentar 'Socialité') por si tienes que recoger algo del tinte y no te puedes mover de la cama de la resaca. Quizás por eso, Ana Obregón la ha alistado a sus filas de 'amiguis' a las que hacer una paella verde, como pasó con Steven Spielberg.
Y es que, la colaboradora de 'Sálvame' ha revelado emocionada en su programa que ha estrechado lazos con Anita en estos tiempos tan duros para la que dará las Campanadas el próximo 31 de diciembre en TVE. “Por circunstancias, no te puedo explicar por qué, hemos conectado”, ha contado María sin dar esos misteriosos motivos. Con tanto secretismo... ¿Es que acaso son las dos concursantes enmascaradas de 'Mask Singer'?
Patiño ha subrayado que ha sido un encuentro vital entre ambas bastante fortuito, ya que ella siempre con el que ha tenido amistad ha sido con el padre de su hijo, Lequio: “No he sido nunca amiga de Ana ni he sido nunca una persona cercana a Ana, de hecho, siempre lo he dicho, he tenido más relación con Alessandro”.
María Patiño y Alessandro en 'El programa de AR'
María Patiño ha asegurado que Ana Obregón es una persona muy generosa y que su pena no la ha hecho anularla como persona, todo lo contrario, ha hecho que saque más a relucir su faceta más humana: “Lo que más me llamaba la atención es que estando en las circunstancias en las que está y estará Ana, en momentos en que me ha visto a mí baja se ha preocupado por mí. A mí me ha dado unas lecciones en muchos aspectos”.
La presentadora de 'Sábado Deluxe' con un contrato a media jornada como coach emocional y representante de Manuel Carrasco ha asegurado que tenía una falsa impresión de Ana que la hacía verla como "muy artista" todo el tiempo, muy del postureo, sin embargo ha descubierto a una mujer muy normal:
“Yo pensaba que era una persona mucho más superficial, probablemente en estos momentos lo único que te queda en la vida, como le ha pasado a ella como muchas madres que pierden a sus hijos, es afrontarlo, pero te digo que he tenido alguna que otra conversación con Ana desde que se fue Álex y le ha costado muchísimo recomponerse”.
Hay muchas ganas de ver a Ana Obregón comiendo las uvas y deseándonos una buena entrada de año en la 1, por supuesto, y es que ella ha sabido salir hacia adelante tras una pérdida tan dura, por eso es la persona perfecta para dar comienzo al 2021: es un ejemplo para todos. Ella representa todas esas grandes lecciones de vida de los sufridores directos del 2020, que nos han dado un repaso (necesario) a esos que nos quejamos de problemas superfluos, que ya padecemos con drama un poco de alergia a las gramíneas o una mala conexión wi-fi.
Foto | G Tres