Hoy venimos a hablar de males de ojos. Pero no, no de esos que te echan y todo lo que te pasa es malo y te caes por la calle y se te rompe el móvil y tienes que acabar llamando a Sandro Rey para que te lo quite. De esos no. Hablamos de un mal de ojos mucho más mundano: los orzuelos.
Porque aunque parezcan algo muy simple, la cosa puede acabar complicándose. Como le ha pasado a Gonzalo Montoya, al que conocimos en 'La isla de las tentaciones' y que ha vuelto (y parece que pisando fuerte) a 'La última tentación' para intentar solucionar (o enredarlo más, que aquí nunca se sabe a qué vienen) su desliz con Mayka.
Y claro, saltaron las alarmas cuando subió a sus stories a principios de esta semana unas imágenes desde el hospital. Y como ya sabemos qué jaleo se puede armar en estas ocasiones, fue él mismo el que aclaró lo que había sucedido.
"Antes de ir a grabar, me salieron dos orzuelos uno en cada ojo, que parecía que me habían dado una paliza", comenzaba explicando. "No me los curé, me han ido saliendo más y durante el viaje en Croacia lo he pasado mal", continuaba.
Claro, es lo que pasa cuando vas dejando algo, que al final se hace bola. Así que acabó yendo a su "clínica de confianza", donde "han operado a toda mi familia" en todo lo relacionado con la vista.
Y menuda sorpresa se llevó al entrar por la puerta: "Nada más llegar me han dicho que a quirófano y me lo han solucionado", zanjaba. Así de sencillito. ¿Que qué aprendemos de todo esto? Que las cositas mejor solucionarlas a tiempo. Y que no hay mal de ojos que no se pueda curar. Y que ahora Gonzalito va a poder ver la nueva edición de 'La última tentación' en HD.