La alfombra de los Goya, bajo mi punto de vista, siempre ha sido una de las alfombras más jugosas y vario-pintas del panorama español. Las razones son varias: la falta de buen gusto de algunas, pese a que elijan diseñadores nacionales para cubrirse de gloria, y los esfuerzos inhumanos que hacen otras para llevar algo de la pasarela nacional, con resultados obviamente desastrosos. Y si a eso le sumamos que las hay que por mucho que lo intentes y se dejen las pelas en ello, no tiene buenos estilistas ni aunque se los regalen pues... sale este ranking de personal de las 5 peor vestidas bajo mi parecer. Veamos si coincidís.
Comenzamos con Ana Obregón, que si tenemos en cuenta su estilo en el día a día, dentro de lo malo quizás esto sea lo mejor, pero aun así, comparada con el resto de personajes desfilando por la alfombra roja... creo que era demasiado para el cuerpo y una cosa es ir formal y otra sacada de una tarta nupcial. Lo siento pero no, no me gusta.
Blanca Suárez, otra que tal baila. Too much para el body la elección de su Pucci. Primero los zapatos, que parece que soy el único que se da cuenta de que le quedan grandes, segundo esa manera de ir enseñando cacha con los vestidos tan elegantes que había por la alfombra y sin necesidad de ir enseñando chicha y tercero... que estas galas siempre pecan de ser demasiado sobrias y se intenta innovar en la medida de la posible, pero siempre hay una que se pasa de rosa. Este año, Blanca Suárez ha sido la elegida.
Estefania de los Santos se pasó con las transparencias, se pasó con los brillos, se pasó con el trajo y lo que no sé es como no arremetió contra el fotógrafo porque hay que ver lo mal que sale esta chica en todas las fotos. Seguro que en otro cuerpo y en otra situación, su traje no hubiese cantado tanto ni hubiese quedado tan desacorde pero para la ocasión, quedó un poco fuera de lugar.
Adriana Ugarte metió la gamba en la entrega y metió la gamba con el vestido. No sé si metió la gamba o directamente patinó, porque con ese traje, cualquiera espera encontrarse un par de cuchillas y una pista de hielo debajo de los pies en vez de unos tacones y una alfombra roja.
Y para ir finiquitando el cotarro, llegamos a Manuela Vallés, con un traje algo grande bajo mi punto de vista, que no termina de convencerme ni de transmitirme, sin sentimiento y con un cuerpo botijo que le hace que no sale nada favorecida. Algo más ajustado (porque la nena tiene cuerpo para ello) no le habría venido nada mal, la verdad.
Pero bueno, no nos quejamos demasiado que de todas las ediciones de los Goya, esta será quizás una de las que será recordada por tener entre sus filas a auténticas elecciones de lujo con los vestidos y por lo general, un aprobado alto en estilismo. Ya me diréis si coincidís o no con mis elecciones.
Fotos | Gtres En Poprosa | Las parejitas de los Goya 2013, ¡arriba el amor! En Poprosa | No hay dos sin tres, ¡rematamos alfombra roja de los Goya 2013!
Ver 7 comentarios