Pisar una red carpet es el sueño de todo proyecto de celebritie, y es que uno siempre se lo imagina como el colmo de la elegancia, el no va más de la finura...Pero no todo el monte es orégano, que diría que el refrán, y muchas veces, lo pretenciosamente chic se convierte en una frikada que (aquí viene la peor parte) quedará reflejada por siempre para la posteridad. Hoy en Fashionistas de la Semana: El anti-glamour de la alfombra roja.
¡Ay cari que me pisas!
Eso es lo que le debió decir Jessica Biel a Madonna, y es que la Princesa del Pop le dio un pisotón a la actriz, de esos que te dejan los juanetes hechos polvo, y además te hacen acordarte de toda su familia. Un consejo, si te vas de fiesta con Madonna, visto lo visto, te recomiendo unas botas militares de esas bien duritas.
¡Momento Batacazo!
Caerse de bruces y darse un batacazo tremendo, es uno de los miedos más comunes de los famosos en estos actos, y es que saben que la prensa, ojo avizor, va a captar el momento, que servirá para que nos echemos unas buenas risotadas. Los tacones de infarto, los nervios o quedarse ciego de un flashazo, pueden ser motivos más que suficientes para volcar y probar la moqueta de primera mano.
Vemos por ejemplo como a Amanda Seyfried sus taconazos se la jugaron, y casi se descoyunta la mujer. Algo parecido a lo que le pasó a Jennifer Lopez y Charlize Theron. ¡Nenas más cuidadito que vais derechitas la cirujano a que os arregle la nariz!
La penúltima copa
En otros casos la culpa es de uno mismo, y es que cuando hay barra libre el descontrol puede ser tremendo. Ahí vemos como a Kate Moss se le subió el champán demasiado y se quedó literalmente pegada a la barandilla. Otras como Pam pierden el saber estar, y con la excusa de "esta es la última copita", acaban con un pedo de flipar, y sino mirad su careto.
Pintadas como puertas, por no hablar del pelamen...
Otro punto a destacar es el tema chapa y pintura, ¡qué sí!, que a estas cosa hay que maquilladitas y arregladitas. ¡Vale!, pero una cosas es eso y otra muy distinta es ir hecha un cromo. Que hay algunas que dan miedo.
De este interesante collage cabe destacar el momento “me he pasado tres pueblos con el corrector de ojeras y parezco y una lechuza”, que se lo digan a Paula Vázquez, Nicole Kidman o Eva Longoria...El momento “estoy atrapada por Crepúsculo” - sí, la saga está haciendo mucho daño en cuanto a make ups se refiere, todas quieren ser vampiros, que se lo digan a Raquel Sánchez Silva, Nieves Álvarez, Blanca Romero...eso por no hablar del momento “Rupert qué me has hecho”, y es que vaya pelamenes que se gastan algunas, entre Ke$ha a lo punky o Natalia Verveke que en vez la tenacilla, parece que se ha pasado la batidora, no sé dónde vamos a llegar.
Pezón a la vista
El momento pezón a la vista, es un clásico de la alfombra roja. Yo alguna vez he mal pensado que alguna hasta lo hace a propósito, asegurándose así salir en todas partes. Ahí las tenéis a cual más fina y glamurosa...y es que como dice el refranero, lo que se van a comer los gusanos que lo disfruten los humanos.
El juanete, el cerco de sudor, la cremallera reventada...el anti-glamour de la red carpet
El zoom es muy mal amigo de los famosos, y gracias a él podemos ver que los juanetes y los callos también son el pan suyo de cada día, para aquellas adictas al taconazo, menos Louboutins y más podólogo, puede ser una solución, ahí lo dejo.
Y qué me decís del cerco de sudor, de eso ni las súper celebs se libran, que aquí suda como pollo hasta el apuntador...
Y claro está que el momento reventón, es otro clásico de este tipo de eventos. Entre las que van prestadas de showroom y se han cogido la talla más pequeña, o las que con tanta cola, pomposidad y telajes no pueden ni andar. La cosa es que las red carpets no son ni tan finas, ni tan elegantes como uno se piensa.
¿Dónde vas de esa guisa?
Y para terminar la sección Fashionista como se merece, una de horteras de bolera, que es lo suyo. Entre el vestido-filete de Gaga que ya es mítico, el vestido a lo cortinaje de cocina de Tilda Swinton, o el vestido muñeco de Michelín de Lucy Liu, uno no gana para disgustos.
Ahora que lo peor es llegar a un sarao y encontrarte a una con el mismo vestido, ¡qué vergüenza!, y es que esto pasa por comprar el ofertón de la semana o el chollo del día. Gracias a este repasito anti-glamour hemos podido ver de primera mano, que no es oro todo lo que reluce, y que a veces la elegancia da paso al chonismo, en un visto y no visto.
Sitio Oficial | In Touch En Poprosa | Fashionistas de la Semana En Poprosa | Los BAFTA 2012. Todos muy formalitos, aunque hubo algún que otro desatino
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