Adele se ha comido el Hyde Park este fin de semana. Y no, no lo decimos porque sigue manteniendo ese tipín con el que se ha quedado a base de hojas varias como las que se encuentran en el parque de Londres, sino por el pedazo de conciertazo que protagonizó ayer ante las 65.000 personas que agotaron las entradas por verla en el Festival British Summer Time. Cinco años después de su último concierto, Adelita no solo ha demostrado que sigue emocionando sino que también nos ha dejado momentazos de lo más surrealistas.
El público británico enloqueció en cuanto el primer acorde de 'Hello' hizo el amago de sonar. Con un glamour que recuerda al Hollywood más clásico y un Hyde Park acompañando la impecable estética del show, Adele cumplió su sueño de actuar en el mismo lugar donde tantas veces había acudido para ver a las grandes estrellas a las que admira.
puede ser esto lo más bonito que ha pasado en el año: adele cantando when we were young, una de sus mejores canciones y la más especial con la bandera 🏳️🌈 frente a más de 65.000 personas.
— tatiana (@adeletskyfall) July 3, 2022
she has my heart forever 🏳️🌈❤️pic.twitter.com/fXSvcXaVWj
'Easy in me', 'Rolling in the deep', 'Someone like you' o 'When we were young' son solo algunas de las canciones con las que no solo consiguió emocionar a su público, sino que también emocionaron a la propia artista, consciente de lo mucho que ha tardado en volver a hacer lo que mejor sabe: tocarnos el corazón con su voz.
Mi nuevo sueño es que Adele me mate de un camisetazo en la cabeza pic.twitter.com/g7MwFDJx5k
— Natalia Álvarez (@Natalia_Who) July 2, 2022
Pero tampoco faltaron los momentos cómicos en su actuación. Por las redes sociales han corrido como petardos los surrealistas momentos que protagonizó Adele entre tema y temón, como cuando casi mata a un fan por un camisetazo propulsado por su nueva pistolita dispara-marchandasing o cuando enseñó que ha dejado de cantar subida a unos tacones: mucho mejor ir en calcetas de fútbol para poder patear al tontaínas que se le ocurriera romper la magia de su espectáculo.