La Isla de las Tentaciones 4: ¡Habemus edredoning! Gal·la cae en la tentación con Miguel de Hoyos tras el plantón de Nico en su hoguera de confrontación

Gal·la debería aclararnos un par de duditas antes de que continuemos con el vicio de esta cuarta temporada de 'La Isla de las Tentaciones'. Lo primero, por qué su nombre está separado por un punto y seguido. Lo segundo, cómo ha tardado tanto tiempo en mandar a freír espárragos (y a comer tabletas de Nestlé y Milka) a su novio Nico, que la ha dejado más sola que la una en la hoguera de confrontación que ella misma convocó con la intención de salvar su relación.

Pero bueno, más vale tarde que nunca... ¡Por fin Gal·la se ha dado el lote con el guapérrimo exviceverso Miguel de Hoyos en un arrebato de dignidad (y un calentón de los que pueden acabar en erupción) durante la última fiesta de la villa de las chicas! Y, aunque ha repetido hasta la saciedad que no ha sido por venganza, está claro que la de Elche ha visto en la actitud infantil de su novio la oportunidad de catar al soltero de los ojillos aguamarina después de un chapuzón con ropa y un poquito de sobeteo.

Tras el roce de las licras a través del perreo intenso de sus ropajes y un apasionado beso en el sofá del jardín de la villa, Miguel de Hoyos y Gal·la se han ido a "dormir" a la misma cama pasando de la cucharita al edredonning en menos de lo que canta un gallo. Vamos, que la pequeña (pero matona) de la casa ha reventado la luz de la tentación de Villa Playa.

El viceverso ha conseguido que la novia de Nico cayera la tentación a pesar de la negativa por su parte de aceptar un beso en la boca del malagueño: "En la boca no", repetía minutos antes de ser ella quien se lanzara a comerle el boquino. Vamos, que le ha durado menos su negativa que el propósito de Año Nuevo de dejar de fumar, ir al gym o dejar de picar entre horas.

Aunque Gal·la le ha negado a las chicas haber hecho travesuras bajo el edredón con Miguel de Hoyos, la concursante ha confesado ante la cámara que su calentón llegó hasta el final: "No estoy siendo sincera. No solo fueron besos, ha habido más. Me he restregado como si me fuera la vida en ello. Es que me pone tanto... Lo tiene que hacer tan bien...", ha revelado entre risas en uno de los totales en los que los del reality se dirigen a la cámara para soltar sus perlitas dignas de caer en el examen de selectividad de Filosofía como parte del ejercicio del comentario de texto.