En un tiempo muuuuy lejano, Julia Roberts se convirtió en la prota máxima de todas las comedias románticas que se estrenaron en los cines. 'Novia a la fuga', 'Come, reza, ama' o, la legendaria, 'Pretty Woman' son algunos de los exitazos de la intérprete y que en la actualidad devoramos vía 'Netflix' los domingos de resaca existencial y con un repertorio de comilonas hipercalóricas sobre la mesa.
Pero, ¿qué motivó a la artista a retirarse de los filmes pastelosos con los que tantos momentos ñoños nos deleitó? Ella misma ha despejado todas nuestras dudas en una entrevista para 'The New York Times Magazine' y la respuesta te va a dejar anonadado/a como mínimo.
"Si hubiera leído un guion del nivel de 'Notting Hill' o muy divertido como el de 'La boda de mi mejor amigo', lo habría hecho. Pero no me ha llegado nada lo suficientemente bueno", ha expresado la actriz de 'Erin Brockovich', haciendo mención a que las propuestas que le han enviado son más pésimas que una telenovela protagonizada por Mari Cielo Pajares.
Julia Roberts y Hugh Grant en 'Notting Hill' (1999)
Además, Roberts ha asegurado que los devenires familiares que ha experimentado en los últimos años también han jugado un papel esencial a la hora rechazar los peliculitas romanticonas que querían ficharla como estrella: "He tenido tres hijos en los últimos 18 años. Eso eleva aún más el listón porque entonces no se trata sólo de '¿Es bueno este material?' También es la ecuación matemática del trabajo de mi marido, el colegio de los niños y las vacaciones de verano", ha sentenciado la queen del cine hollywoodense, alegando que su próxima comedia romántica se titula 'Ticket to paradise', se estrenará el próximo octubre y cuenta con George Clooney como compi de reparto. Si es que las cosas de palacio, van despacio.