Pinchazo va, pinchazo viene. Así es la vida de Mayka de 'La isla de las tentachonis'. La joven ha confesado aquello que jamás se había atrevido a desvelar: es completamente adicta a las clínicas estéticas, no puede pasar por una y no preguntar por algún tratamiento.
Lo de esta chica es insuperable. Eso sí, la sinceridad la lleva por bandera. "Los retoques me enganchan muchísimo porque cada vez que salgo de la clínica me veo mejor, y entonces quiero repetir". ¡Dí que sí!
Pero atención, porque no hay parte del cuerpo que la novia de Tony Spina no se haya retocado. Primero se operó el pecho porque se veía "desproporcionada", algo que le ayudó a "encontrar trabajo en la noche", después se pinchó botox en la cejas, se inyectó labios cuatro veces y ha eliminado por completo sus ojeras.
¿Pero cuánto money se ha dejado esta muchacha en pinchazos? Y la cosa no queda aquí, es que también se ha hecho un peeling, varias limpiezas de cara, se puso "plasma" y se hizo "la punta de diamante". ¿Qué significa todo esto? Ni idea.
El caso, que Mayka lleva el gepeto como un cuadro, de bonito, me refiero. Ahora toca pensar en el siguiente retoquito, aunque pocas zonas del 'body' le quedan libres...
