Se acerca el otoño y las celebrities cuelgan las chanclas y el bikini para volver a las galas y saraos de la gran ciudad. El último se ha celebrado en el Museo Guggenheim de Nueva York, con motivo de la presentación de una nueva fragancia de Estée Lauder, y allí hemos podido ver un público súper variado y no con demasiada it-girl, que últimamente están hasta en la sopa.
Las hermanas Olsen no se pierden nada que tenga que ver con la moda ni siquiera tangencialmente, y se presentaron en la fiesta con su habitual look negro total. Eso sí, las sandalias de ¿Ashley? son una pasada. Mary Kate, eso sí, se calzó otro estilismo de los que no marcan una sola forma, ancha como un saco. Y aún así, no me termina de disgustar.
A Rose McGowan se le fue la mano con el cardado del tupé, pero salvo eso, al menos iba bastante discreta para lo que nos tiene acostumbrados. Me gusta mucho el maquillaje, sobre todo los labios en ese tono coral tan clarito. Y el clutch es chulísimo.
Una de las que suelen ser apuesta segura es Iman, y es que a mí esta mujer siempre me ha fascinado. Esta vez no me termina de convencer esa especie de forro nude que lleva bajo el vestido ni el corte, aunque el color y el tejido de gasa sí me parecen muy bonitos. El pelo y el maquillaje, de diez.
La que no me convence nada es Julianne Hough, que apareció con un vestido que no sé por qué, me recuerda a los looks de Britney Spears a finales de los noventa. Tanta transparencia con topitos y esa abertura en triángulo en el abdomen me parecen horrorosos. Qué poco estilo, chica.
Monotonísimo el color del vestido de Maggie Gyllenhaal, que aunque le queda de lujo y me parece un corte muy favorecedor, el tono es horrible, no le aporta nada y el estampado es de película de terror. Le hace flaco favor a esta chica, acompañada por cierto de Peter Sarsgaard - ¡actorazo!
Linda Evangelista fue un poco gótica para mi gusto, y tanta superposición y volumen no me termina de convencer. Viendo el corte del resto de la gala, bastante más casual, no me parece muy acertado para el momento. Y eso que a esta mujer le queda todo de escándalo.
A Drew Barrymore la veo guapísima, y eso que la chaquetilla que lleva me parece un pelín larga, y creo que le favorecería más si tuviera el corte a la altura de la cintura. Por lo demás, muy bien, la veo muy fresca y el peinado le queda divino.
Nada que ver con esa especie de saco con forma de tubo de satén lila ho-rro-ro-so que llevó la modelo Joan Smalls. Ojito a los zapatos que parecen ortopédicos, y a la forma del escote que parece que le asoma el sujetador. ¡Mátame camión!
Vía | Popsugar Fotos | GTres En Poprosa | Ashley y Mary-Kate Olsen lo están fashion-petando... y encima les dan el premio gordo En Poprosa | La Gala Starlite: de todo hubo, como en botica
Ver 4 comentarios