En silencio y desde Zarzuela, Letizia está muy pendiente de lo que ocurre con Luis Rubiales, Jenni Hermoso y el tremendo escándalo que se ha formado. Mientras saltaba junto a las jugadoras a pie campo, la reina no imaginó lo que vendría después. Era impensable que la final del Mundial pudiera despertar el debate más polémico de los últimos tiempos: ¿Hubo agresión o no la hubo?
El Gobierno, la oposición y gran parte de la sociedad condena los actos de Rubiales. La Fiscalía ha abierto diligencias para investigar un posible delito de agresión sexual y la familia del acusado, destrozada, asegura desde Motril que todo esto se trata de "una cacería". La madre de Luis, encerrada en la iglesia del pueblo, se niega a comer hasta que "Jenni Hermoso diga la verdad".
La repercusión es tremenda. No hay programa de televisión que no trate el tema durante varias horas cada día y los medios extranjeros ya se han hecho eco de lo sucedido. Más allá de nuestras fronteras, observan el escándalo con tremendo estupor. Lo mismo ocurre en Zarzuela, donde están muy pendientes de todo lo que ocurre en el llamado 'Caso Rubiales'.
"Ganar un mundial de fútbol femenino no se ve todos los días, y que se vea empañado por un hecho repugnante mantiene a la reina muy pendiente de la situación, aunque en silencio", aseguran fuentes de Zarzuela en El Confidencial Digital. Al parecer, en Casa Real temen que la imagen de España, de la Corona y del deporte nacional quede denostada.
Felipe y Letizia - Gtres
Y para colmo, a Felipe y Letizia también les preocupa que la polémica haya salpicado a su hija pequeña. Sofía estaba al lado de Rubiales cuando este se tomó la libertad de agarrarse el paquete durante uno de sus ataques de euforia. La Fiscalía ya estudia demandar al que fuera presidente por "exhibición indecente en presencia de una menor", tal y como indican desde Informalia.
Fotos: Gtres