A Miguel se le ha truncado el verano. Tras pasar unos días en Mallorca junto a Nacho Palau y los cuatro niños que, según el juez, no son hermanos, Bosé ha regresaba a México y recibía la peor de las bienvenidas. Ocho encapuchados, dispuestos a llevárselo todo del casoplón del cantante, accedieron a la vivienda mientras Miguel y sus niños tomaban el té. En cuestión de minutos, arramplaron con todos los objetos de valor.
Parece una película, pero es real. Miguel, Tadeo y Diego han sufrido el susto de sus vidas. Disfrutaban de una tarde tranquila en su mansión mexicana cuando, de pronto, ocho tíos con la cara cubierta se plantaron en el salón. Tras amedrentar al cantante, se hicieron con un buen botín y lo cargaron en la Chevrolet Suburban, la furgoneta de Bosé. Secuestraron al chófer y se dieron a la fuga.
Como es lógico, Miguel y los pequeños se quedaron a cuadros. Al parecer, ninguno de ellos ha sufrido daños. Tal y como relata Informalia, todo ocurrió en la tarde del 18 de agosto y se desconoce si Miguel ha interpuesto ya la denuncia pertinente. Entre los objetos robados, hay joyas y objetos familiares de valor sentimental.
Miguel Bosé - Gtres
Al parecer, la banda criminal que asaltó la casa de Bosé siempre actúa el mismo modo: cuando están seguros de que el inquilino está dentro, acceden y comienzan su show. Asustan e intimidan a sus víctimas con un solo objetivo: hacerse con el botín lo antes posible. Además, a través de la amenaza, consiguen que los inquilinos revelen las contraseñas de sus cajas fuertes.
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