La relación entre Antonio David y Marta Riesco ha terminado para siempre. De la noche a la mañana, la periodista hacía pública la noticia: su idilio con el ex de la Carrasco ya no existe. Se acabó el amor, el postureo barato en Instagram y la cenas gratis en pareja gracias a la publicidad. Aquel paraíso que nos vendieron a través de Instagram se ha esfumado y, según Marta, existe una clara responsable: Rocío Flores.
Sin miedo alguno, Marta señaló a la hija de su churri como única culpable de la ruptura. España al completo quedó impactada con tan rotundo señalamiento, pero Rocío no reaccionó. Lejos de entrar al trapo, ignoró por completo a la que fue su amiga del alma y continuó con sus publicaciones rutinarias, esas en las que publicita ropa y restaurantes.
Marta, triste y sin el hombre al que todavía ama, intenta ahora recomponer el puzzle de su vida. Su historia con Antonio David arruinó su carrera en el 'El Programa de Ana Rosa', destrozó algunas de sus amistades y, finalmente, provocó su salida de Telecinco. En la cadena ya no cuentan con lo servicios de Riesco y el nuevo código ético del grupo impide que se hable de AntonioDá.
Tal y como mostró a través de Instagram, la periodista ha actualizado su currículum y está dispuesta a comenzar un nuevo capítulo en su vida laboral. Pretende continuar en televisión, pero lo hará sin hablar de sus intimidades. Quiere ser una simple redactora, una trabajadora más. Desea currar duro para convertirse en una profesional del medio que tantos disgustos le trajo en los últimos años.
En los que respecta a Rocío Flores, no hay novedades. Su reacción ante la ruptura está clara: el silencio más absoluto. La ex superviviente no quiere hablar del tema, al menos sin cobrar por ello. Pese al ataque recibido por parte de Riesco, Rocío se mantiene callada.
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