Mucho se está hablando últimamente sobre la audiencia de 'Sálvame'. El primero en darle voz al asunto fue Antonio Canales que, tras su despido del programa, rabió en directo: "Ahora 'Sálvame' no es el número uno. Os están ganado hasta teleseries, vamos a ver, que no estoy mintiendo, para que la audiencia lo sepa. Tú vendes humo y yo no", le soltaba a Carlota Corredera.
Y era verdad. 'Sálvame' ya no está en el número uno permanentemente y hay días en los ha estado ganándole 'Tierra amarga', la telenovela turca de las tardes de Antena 3. Y es que el futuro del programa, según muchos, parece estar tambaleándose más que una vajilla en una montaña rusa.
Ya no se sabe quién tiene la culpa. Aquí parece que unos se las cargan a otros y otros se las cargan a unos. Y Kiko Matamoros tiene su propia opinión, y últimamente está siendo bastante crítico con el programa. Y, de hecho, ha dado a entender en más de una ocasión cómo la presencia de Rocío Carrasco ha podido ser una de las culpables del desplome de audiencias.
"No veo muy claro el futuro de 'Sálvame'", ha explicado tajante en una entrevista exclusiva para la revista 'Lecturas', la segunda casa de cualquier colaborador del programa. Además, asegura que no sabe "por dónde va a tirar" el programa a partir de ahora.
Y uno de los principales problemas, según él, parecen ser los nuevos fichajes... y la edad de los nuevos fichajes: "Es un cambio generacional erróneo, porque no por ser joven se es bueno". "Hay gente que tampoco pertenece a la última hornada y que están ahí que a mí particularmente como espectador no me producen ningún interés", añade.
Eso sí, que quede claro que en ningún momento mete en este saco a Miguel Frigenti. Que habrán tenido muchas discusiones, sí; que se habrán gritado muchas veces, también... Pero en el fondo, no nos engañemos, le tiene aprecio: "Frigenti tiene mucho que ofrecer y que dar, me parece muy bueno. Yo el reconocimiento profesional a quien lo merece se lo hago".
"Hay, sin embargo, otros (vamos a decir triunfadores) que no acabo de entender lo que tienen, el secreto de su éxito", zanja. Y que se dé por aludido quien se tenga que dar.
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