James Franco ha vuelto a salir a la palestra y no precisamente por estrenar una de sus películas. El actor ha decidido manifestarse (después de cuatro años) acerca de las acusaciones que recibió por haber abusado sexualmente de algunas de las alumnas de su escuela de interpretación, 'Studio 54' (ahora cerrada). Aunque James lo negó en un principio, ahora ha confirmado la versión de las chicas.
"Abusó de su poder al explotar a las mujeres no famosas con las que trabajaba con el pretexto de darles oportunidades", afirmó Sarah Tither-Kaplan, ex alumna de Franco, en el 2018.
Por otro lado, se especuló que el actor pagó más de dos millones de dólares a dos de sus supuestas víctimas con el fin de que la denuncia no prosperara.
Ahora, James ha decidido rescatar el tema y contar su versión en el podcast de Jess Cagle, 'SiriusXM': "Me estaba recuperando por abuso de sustancias. Tuve algunos problemas y lidiar con eso también fue complicado porque estaba relacionado con la adicción", confiesa el actor.
La adicción al sexo es una enfermedad con la que Franco luchó durante mucho tiempo: "Es una droga tan poderosa. He estado enganchado durante 20 años".
"Durante mi estancia en la academia, me acosté con los estudiantes y eso estuvo mal. Pero, como dije, no es por eso que comencé en la escuela y no fui la persona que seleccionó a los alumnos para estar en clase (...). Hubo ciertos casos en los que tuve cosas consensuadas con estudiantes y no debería haberlas tenido, sentencia James Franco.