Corinna, que tiene ahora cierto parecido a la 'Cerdita Peggy' tras sus nuevas operaciones (suficientes como para cambiar de identidad en un nuevo país con un pasaporte falso), ha concedido en exclusiva una entrevista a Eduardo Inda para 'Ok Diario' en un hotel de Londres.
.@eduardoinda entrevista a Corinna Larsen en un hotel en Londres y asegura que llegó muy nerviosa, que no vetó ninguna pregunta y llevaba un "taco de notas" #AR5O https://t.co/0haV34VzDI
— El programa de Ana Rosa (@elprogramadear) October 5, 2020
Larsen está a la espera de una nueva fecha para declarar ante la Audiencia Nacional, pero mientras tanto, para no aburrirse comiendo pipas (que a lo mejor por eso se les han quedado los labios así de chorizones), se entretiene repartiendo exclusivas a los medios como un granjero alpiste a sus polluelos: primero fue a la BBC, luego a Paris Match y ahora al medio de Inda y Manuel Cerdán, que han demostrado tener un control sobre la lengua de 'Shakepeare' que ni un nativo de Nottingham.
La germano danesa con más apellidos de los que puede tener en stock Amazon (supongo que también los venderán) ha garantizado que la Casa Real se ha buscado sus propios problemas con cierto retintín, matizando que no es que los asuntos familiares salpiquen la imagen de Felipe VI, sino que son sus propios asuntos y, por ende, tiene parte de responsabilidad, aunque admite que el asesoramiento a la monarquía ha sido nefasto.
"Pienso que el Rey Felipe efectuó un cambio bastante sustancial cuando subió al poder en 2014 (...) diría que sin duda está tratando de pasar a una era más transparente en cuanto a finanzas", ha dicho la mujer en lo que parecía una defensa al marido de Letizia refiriéndose a la Ley de Transparencia, hasta que se ha Corinnao de nuevo diciendo: "Felipe no puede decir que no tiene nada que ver con ello si te has beneficiado de ello toda tu vida". Yo creo que aun no le ha perdonado que nunca la llamara 'mamá'.
La mujer que no ha sudado de esfuerzo en su vida, solo por los rayos solares en Mallorca (lo otro es muy 'working class', como pagar con cash) se ha reiterado en todo lo dicho sobre su relación sentimental con Juan Carlos, al que amó y por el que sufrió más que Marco en busca de la madre con un mono al hombro al que no lavó en los seiscientos episodios. El primate debía oler como si la caca y el sudor se hubieran casado y estuvieran celebrando el festín en el cuerpecito de Amedio.
Corinna, que escucharla despotricar es más adictivo que la nicotina, ha confirmado la existencia de "la máquina para contar dinero". Por muy de 'La Casa de Papel' que suene, es real, como el Caso Mainat. Lo verídico supera la ficción, en España siempre es así. ¡Chúpate esa, Finlandia! Tanto presumir del mejor sistema educativo del mundo... ¡Pero todo lo que veis en Netflix os parece imposible!
Dice que la vio en Palacio, donde suelen ir las cosas despacio (excepto las infidelidades a Sofía, eso cogió buen ritmo y cualquiera lo paraba). Corría el año 2006 cuando Cori pisó la 'Sala de Tesorería', un lugar como donde los duendes mágicos de Harry Potter guardaban la piedra filosofal. "Era asombroso, me quede boquiabierta", ha dicho (tranquilos, sobre dicha máquina, no seáis malpensados).
Por cierto, ¿no os ha parecido siempre curioso que Juan Carlos padeciera de la cadera? No digo (corin)ná, y lo digo todo. Son las consecuencias evidentes de sacar tanto al elefante de safari...
Inda le ha preguntado en su perfecto inglés de los montes (of the mountains) que si llegó a ver mucho money cash en Zarzuela. Corinna ha dicho que sí, como en todas las preguntas que tenían el mínimo detalle como para dejar al Rey Emérito a la altura física de Lolita Flores (1,20 m aproximadamente).
La aristócrata ha señalado que Juan Carlos I transfirió hasta trescientos millones de euros en maletas que llegaban desde Suiza al aeropuerto de Barajas. En ese caso, los perros rastreadores no lo detectaron. ¡Vaya inútiles! Siempre lo he dicho: deberían contar con 'Pancho, el perro millonario' en los aeropuertos. Ese lo hubiera olido antes de pasar por Aragón.
