Ponce y Soria ya han dado el paso. Ayer, ambos cruzaban la cortina de 'El Hormiguero' al son de la melodía del programa. Saludaron al público, se miraron entre sí y tomaron asiento junto a Motos. Ella estaba nerviosa, él también, y fue Pablo el encargado de romper el hielo generando una bonita declaración de amor del torero a su chorba.
Pablete se lo puso fácil y a su querido amigo: "¿Cómo es Ana? ¿puedes presentarla tú?". Le puso en bandeja el piropo fácil, el discursito tierno con el que encogernos el corazón. Y lo hizo. Enrique cogió la mano de su chica y se deshizo en halagos: "Es la mujer de la que estoy enamorado locamente... Hay una cualidad que para mí sobresale por encima de todo y es el corazón tan grande que tiene. Es buena persona de verdad. Está más preocupada por los demás que por ella misma".
Soria, todavía nerviosa, se limitó a sonreír bajo el aplauso forzado del público. Después de ese momento, la tensión se rebajó en plató. Comenzaron sentirse algo más cómodos y la estudiante reveló el motivo real de su visita: "Tenía ganas de que la gente pueda conocerme como soy. Nadie me conoce. Llevamos ya desde... bueno. Empezamos nuestra relación y la prensa nos ha dado mucha caña", decía.
Y sí, es cierto que se han publicado miles de titulares acerca de su relación, pero todavía queda una pregunta en el aire: ¿cuándo empezaron? ¿Por qué los tortolitos confiesan la fecha real? Fácil y sencillo: se enrollaron cuando Ponce y Paloma estaban juntos.
Enrique Ponce y Ana Soria - Antena 3
Sin detallar el día, Ponce ha confesado que la primera vez que vio a Soria se enemoró de ella. Ocurrió durante una de sus corridas y ella estaba entre la multitud: "Me motivó. Ese día corté cuatro orejas", decía entre risas. En ese mismo instante, Ponce se delató. Tal y como publica Informalia, la última vez que el matador se llevó tal reconocimiento fue el 24 de agosto de 2017 en Almería. Es decir, Anita tenía entonces 18 añitos y Enrique hacía el papel de marido ejemplar junto a Paloma Cuevas.
Más allá de la evidente infidelidad, lo cierto es que la pareja se limitó a jugar su papel de víctima. No ha sido una temporada fácil para ellos debido al "acoso" mediático y Ana decidió ponerse en manos de profesionales. Dos años de terapia en los que dejó de lado los estudios. Debía centrarse en su salud mental y ahora se siente con fuerzas para terminar lo que empezó.
Fotos: Antena 3