La relación de Ana María y Ortega Cano va de mal en peor. Desde hace unos meses, el torero y su esposa no comparten la misma forma de vida. Él quiere descansar, pero Aldón tiene ganas de jaleo. Le gusta salir, sentirse activa y, especialmente, sentarse en la tele y cobrar como jamás lo había hecho. La ex frutera se está embolsando pastizales descomunales desde que decidió adentrarse en el universo Mediaset, y aunque su decisión le ha traído más problemas que alegrías, se niega a dejar de ingresar.
Así de claro. Ana María está afectada por la gravísima crisis que atraviesa su matrimonio, pero por nada del mundo dejará la caja tonta. Es dinero fácil, rápido y directo. Aldón se siente una mujer libre e independiente, y aunque adora a su marido, las diferencias son cada vez más evidentes. A sus 68 tacos, el torero lo único que pide es paz, amor y el Plus para el salón (el de los toros, no el de Mitele). Ella, sin embargo, se siente más fuerte y capaz que nunca.
Tal y como publica Informalia, el torero le habría hecho una petición muy seria a su mujer. Está convencido de que es necesario que ella deje la televisión para salvar la pareja. Ana María, sin ni siquiera meditarlo, ha respondido: No, no y otra vez no. Según la colaboradora, los problemas en el matrimonio no tienen nada que ver con su labor en Telecinco.
Ana María Aldón y Ortega Cano - Gtres
Mientras tanto, Gloria Camila hace también hace oídos sordos a las palabras de su padre. El diestro también le pidió a ella que no hablase de aspectos familiares en la tele, pero lo pasó por el toto. Todo apunta a que, a pesar de los deseos de Ortega, la guerra entre su hija y su esposa no termina aquí.