Si hay una influencer hasta decir 'hashtag' en nuestro país, esa es Dulceida. Lleva tanto tiempo hablándonos a cámara contándonos hasta los pelos que se acumulan en su peine, que ya parece que sea de nuestra familia y todo. Bueno, eso hasta que la vemos celebrar un fiestorro por su 32 cumpleaños a través de sus instastories mientras que nos morimos del asco en nuestras respectivas casas (ojalá de forma presencial), repasando la cuenta bancaria al dedillo (lamentando ese gasto innecesario que hicimos) y viviendo un día más sin ser tan rico/a como para formar parte de su círculo más cercano. ¡Vaya hostia de realidad! Pero bueno, pensad que por lo menos no somos Alba Paul, gran ausente de la fiesta. ¡Cinco años de matrimonio fake para que luego no te inviten ni a una triste medianoche el día de su cumple!
Dulceida vivió un dulce día rodeada de amigos, entre los que se encontraban famosísimos como Susana Molina, Melo Moreno, Madame de Rosa, Marta Riumbau, Melyssa Pinto, Pole o Raoul Vázquez ('OT 2017'). Todos los invitados fueron desplazados en autobús (privado, las influencers no viajan en transporte público si no es para hacerse fotos alternativas en la parada) hasta el lugar de la cena, que coger después el coche está complicado. Un picoteo en el que no faltó de nada y mucho menos postureo: la cumpleañera apareció con un vestidazo de Ze García a juego con las cortinas de brilli brilli del lugar.
Más que un fiestorro de cumpleaños (que también), la celebración de Dulceida parecía una feria llena de actividades para sus invitados: que si photocall, karaoke, bailes, momentos de llorera... Pero, sin lugar a dudas, lo mejor de todo es que pudieron disfrutar en directo de un concierto gratis de Camela. ¡Qué ironía, justo cuando su amor ha zarpado de forma definitiva para no volver nunca más!
Ángeles y el Dioni, que estaría a una de sus vueltas de echar la papa después de tanto drinking festivo, pusieron el broche de oro a un bailoteo hasta el amanecer cantando temazos como Cuando zarpa el amor, Lágrimas de amor o Sueños inalcanzables, entre otras muchas.
Dulceida dándolo todo junto a Camela y con el móvil, como prolongación de su mano, grabando absolutamente todo
El balance de la noche para Aida Domenech se resume en que fue una farra de la hostia. Vamos, que Dulceida es la Ava Gardner del postureo nacional: "Increíble, de verdad, gracias. #Dulce32. Resaca de felicidad (y del jager). Gracias por todo el cariño y todas las felicitaciones con mucho amor, espero que estéis disfrutando conmigo de estos días", escribía tras tomarse el Ibuprofeno reglamentario al levantarse al día siguiente de su fiestón de cumpleaños.