Hoy España se ha levantado con los ojos como Özil (hinchados) y yendo directa al armario donde guarda el Paracetamol por la pechá de llorar (como decimos en mi tierra) que nos metimos viendo la pedida de matrimonio de Hugo a Lara en el especial de 'La Isla de las Tentaciones: 6 meses después', grabado en el 'Airbnb' lujoso de todos los años.
Lara y Hugo han superado los grandes obstáculos de su relación en la isla donde hay que ser golfo para sobrevivir, ahí sí que hay Cayos Cochinos y no en 'Supervivientes'.
Es más, esta aventura ha tenido efecto antivirus en los rasgos más tóxicos de su noviazgo, como esos celos que le impedían confiar el uno en el otro. Ahora se supone que Hugo puede invitar a un Frigopié a Mari sin que Lara se encabrone (y eso que al gallego le encantan las cabras).
Hugo Pérez, el cachorrillo gallego por el que mami Sandra ha llorado a moco tendido día sí y día también, ha compartido en Instagram la carta que le entregó a su prometida cuando llegaron al hotel tras su pedida de mano ante toda la audiencia amante del cancaneo fino.
"Hola amor, si estás leyendo esto, es que todo esto ha salido bien y me has dado el sí quiero. Lo primero de todo, gracias por estar siempre ahí, dije muchas veces que lo bueno se hace esperar y que vamos a compartir el resto de nuestras vidas juntos", empezaba escribiendo el galleguiño a Lara con tan solo esas cuatro paredes de hotel como testigos (lleva unas semanas grabado).
Conforme ha ido sumergiéndose en los versos románticos de esta epístola que profesaba amor verdadero en cada uno de sus trazos (hay que darle la narrativa romántica que se merecen los nuevos Iker y Sara), la tía dura de Lara se ha ido deshaciendo en lágrimas, sin poder contener la emoción que sentía por el paso tan importante que han dado en su relación.
"Haber pasado por la isla ha servido para darme cuenta de que eres lo único que quiero, espero que este sea uno de los días más bonitos de tu vida, porque para mí lo es. El primer paso está dado, ahora solo toca aumentar nuestra preciosa familia, te quiero", ha continuado leyendo llorando como una magdalena de fresa (por el color del vestido) interrumpiendo su lectura con un "¡wow!" y sellando la carta con un precioso beso a su amado 'lloromicas'.
Vía | @hugoperezcabaleiro