Felipe VI ha sido pillado en uno de sus descansos reales. Como cualquier otro mortal, el hijo de don Juan Carlos necesita desconectar del curro, quedar con amigos y compartir unas risas alrededor de una mesa cargada de buen vino. Han sido días intensos para el monarca, y tras visitar Fitur junto a Letizia, el monarca ha decidido pasar unos días con sus colegas.
Aunque no es comparable con la afición de su padre a las juergas y comilonas, a Felipe también le gusta darse un capricho de vez en cuando. No se va de safari y tampoco compra botellas de Vega Sicilia sin control, pero sí se escapa junto a su gente cuando tiene ocasión. Este fin de semana, ha sido pillado en Sierra Nevada.
Como no podía ser de otro modo, a Felipe le gusta esquiar. Podría haberse decantado por el fútbol o el baloncesto. Por el tenis, el ping pong o simplemente el 'running'. Pero no, al él le gusta la nieve. Es el deporte para pijos por excelencia, y Felipe, aunque cuida su imagen al máximo, ha nacido en el seno de una familia con gustos caros y privilegios por doquier.
El Rey Felipe VI, pillado tomando algo en Sierra Nevada - Gtres
En cualquier caso, lo cierto es que el esposo de doña Letizia ha pasado el fin de semana en la nieve sin la compañía de su mujer. Al parecer, necesitaba unos días para relajarse, desconectar y tomarse un refrigerio. Tal y como mostró 'Socialité', el rey estuvo tomando algo en un bar de la zona e intentó esconderse tras unas gafas de sol que no hicieron su función.