Don Juan carlos está hasta la coronilla de tanto turbante, tanto jeque y tantísimo calor. El verano en Emiratos Árabes no está siendo plato de buen gusto para el ex monarca, y es que además de estar achicharrado, el yayo de Victoria Federica extraña su tierra y así se lo ha hecho su saber a su círculo más cercano. Quiere volver a casa, disfrutar de su país, de su familia y, por supuesto, de sus colegas.
Las comilonas en compañía de amigos, la caza y las regatas son imprescindibles en la vida de Don Juan Carlos. Tras dos años de exilio, el emérito regresaba a España el pasado mes de mayo para visitar Sanxenxo, montar en barco y, ya de paso, tener una conversación con su hijo. Charló con él durante horas y se reunió también con parte de su familia en un almuerzo en Zarzuela.
Su visita causó un gran revuelo a nivel nacional, algo que no gustó ni un pelo en Moncloa. Felipe VI tampoco creyó necesario semejante espectáculo, y para evitar que volviese a suceder, tomó la decisión más temida por su padre: no habrá más visitas hasta nuevo aviso. Juan Carlos, resignado, regresó a Abu Dabi en un jet cargado de marisco sin saber cuándo regresaría a su amada tierra.
Juan Carlos I en su última visita a España - Gtres
Tal y como publica Informalia, ese momento tan deseado por el antiguo monarca podría llegar dentro de poco. En septiembre se celebrará una regata de barcos de 6 metros en Cascais, Portugal. Estará organizada por Patrick Montero de Cardós, un importante magnate que reside en Nueva York y guarda una estrecha amistad con Juan Carlos. Al parecer, esta podría ser la oportunidad del emérito para reencontrarse con sus colega sy disfrutar de una buena regata. No será en aguas españolas, pero tendrá que conformarse.
Según el citado medio, Juan carlos habría mandado un mensaje a la tripulación del Bribón en los últimos días: "Os echo mucho de menos". A sus 84 tacos, tan solo desea descansar en su país y alejarse de los 50º que se alcanzan en Abu Dabi en estas fechas.