Si hay alguien cualificada para hablar de educación sexual en este país, a parte de quien se acabe de hacer un maratón de las dos temporadas de 'Sex Education' y Tom Brusse (pero solo de la parte práctica), esa es Aitana Ocaña. ¿O es que acaso los que legislan sobre este tipo de educación se han tirado encerrados tres meses y pico, conviviendo con 15 jóvenes cachondos en una academia donde los únicos puntos limpios de cámaras eran el baño y la cama? Pues claro que no, y así lo ha demostrado ella misma en su última aparición en 'El Hormiguero', donde estuvo ayer lunes como invitada.
¡Ah! Pues esto no parece entenderlo todo el mundo ya que, tal y como ha contado la artista, el día que se mojó sobre este tema la quemaron en la hoguera cibernética (de los haters) cual Rosito en 'La Isla de las Tentaciones'. "¡Buah, mi padre me dijo 'para qué te metes en esas movidas'! Yo no suelo abrir estos debates y en twitter lo comenté", ha respondido Aitana muy espontánea cuando el presentador le ha recordado el episodio de su linchamiento público.
En #aitanaEH Y LA EDUCACIÓN SEXUAL pic.twitter.com/o4f5dEQ2ao
— Sebasmaspons (@Sebas_Maspons) December 21, 2020
"Es una opinión personal, quizás cuando te ve tanta gente es mejor no dar estas opiniones porque no quiero adoctrinar a nadie, sino que cada uno tenga su propia opinión, pero considero que sí que tendríamos que impartir una asignatura de educación sexual en algún momento de nuestra educación", ha continuado la ex triunfita de más éxito internacional de esta segunda hornada de talento descubierto por Noemí Galera.
Aitana ha seguido manteniendo su hipótesis, con la vocecilla que tiene y esa carita angelical, como si le estuviera exponiendo un trabajo de cartulina sobre los tipos de energía (eólica, hidráulica...) al profe: "todos los niños tienen a su alcance un ordenador y pueden ver lo que quieran", ha dicho provocando la duda en Pablo Motos (cual profe tocapelotas que hace preguntas y te corta el rollo de lo que estaban recitando como un papagayo) de si se estaba refiriendo al porno.
Pero ella, como estudiante aventajada (la segunda de su promoción, solo por detrás de Amaia) le ha aclarado su cuestión con un "sí, me refiero al porno donde incluso los propios actores y actrices porno lo dicen 'oye, esto no es real', pero claro, tienes que explicarlo porque si no se pueden liar, pueden confundir esa ficción con la realidad", ha zanjado no sin ponerse nerviosa al pronunciar la palabra y la imagen tabú en cualquier sofá familiar.
De este modo, tras este maravilloso TFG (Trabajo de Fin de Grado) de Aitana sobre la educación sexual, llega el apartado de las conclusiones. La primera es que escuchar a nuestra Aitana decir 'porno' es como pillar a Winnie The Pooh fumándose un porro en los baños del bosque con sus colegas, ver a los Cantajuegos bailando twerking o el doblaje de una serie turca (movimiento de labios por un lado, audio por el otro, como las corneas de Leticia Sabater): algo raro, pero posible.
La segunda, es que lo de esta chiquilla no tiene nombre. ¿A quién se le ocurre opinar libremente en las redes, Aitana? ¿Es que acaso te crees que estamos en un país democrático o que cada uno puede tener una forma de ver las cosas? Esta, que por cantar 'La Revolución Sexual' en 'Operación Triunfo' ya se cree que en el siglo XXI ya va siendo hora de llamar a las cosas por su nombre... Uff, de verdad, es que los jóvenes de hoy en día... (#ModoIroníaON)
