Otra cosa no, pero la Esteban tiene pasta por un tubo. No es multimillonaria ni tiene un yate atracado en Ibiza, pero ojo, porque podría alquilarse uno de quince metros de eslora sin ningún problema. Belén lleva más de 25 años facturando como personaje público, y ahora que tiene su propia empresa, se está forrando a costa del vermú de los españoles.
Belén es una visionaria en toda regla. Si hay algo que de verdad nos gusta en este país es el picoteo del mediodía. O lo que es lo mismo, el mal llamado vermut que casi siempre termina en borrachera. La Esteban ha sabido amortizar la buena costumbre española, y precisamente por eso, está ganando pasta vendiendo gazpacho, patatas fritas y alguna cremita de verduras.
A tanto ha llegado la fortuna de la Esteban que se ha lanzado a comprar inmuebles. Concretamente, Belén le ha hecho un regalito a su única retoña: un pisazo de 100 metros cuadrados valorado en 346.000 euros, tal y como publica Informalia. Sí señor, a Andreíta le ha caído del cielo una propiedad situada en Paracuellos del Jarama, muy cerquita del chalet familiar donde reside su madre.
Belén Esteban en Sálvame
En cuanto a las ganancias de Belenchu, desconocemos cuánto 'money' puede llegar a embolsarse al año, pero solo en Telecinco, factura 375.000 anuales. Cágate, lorito. Menudo sueldazo el de Belén. Y eso, por supuesto, sin sumar los contratos publicitarios que acumula la tertuliana.